Robert Stephenson Smyth Lord Baden-Powell nació en Londres, Inglaterra, el 22 de febrero de 1857. Fue hijo de H.G. Baden Powell, profesor de Oxford. Su madre era hija del almirante W.T. Smyth y nieta de Joseph Brever, explorador de América. Baden Powell fue, por lo tanto, el descendiente de un religioso, por un lado y de un aventurero colonizador del Nuevo Mundo, por el otro.
B-P COMO NIÑO:
Cuando Baden Powell tenía solo tres años, muere su padre, dejando a su madre con siete hijos, el mayor con menos de catorce años de edad, con frecuencia sufrieron penalidades, pero el mutuo amor de la madre por los hijos y de éstos por la madre, siempre los sacó adelante. Roberto vivió una vida encantadora siempre al aire libre, en compañía de sus cuatro hermanos, excursionando y acampando con ellos en muchos lugares de Inglaterra.
A los trece años estudia con beca en la Escuela de Charterhouse de Londres. No es un estudiante distinguido, ya que sus profesores descubren su gran facilidad para "dormir en clase". Es un buen compañero y es el que más y mejores iniciativas aporta a la "pandilla". Los lugares más frecuentes para sus juegos son los bosques que están junto a la escuela.
En 1901 en Inglaterra se da cuenta que su libro "Guía para explorar" es utilizado como libro de lectura en las escuelas y lo que es más, los dirigentes de la Brigadas Juveniles Católicas, lo utilizan como medio e instrumento educativo de sus jovenes.
Banden Powell descubre que puede ayudar a la juventud y estudia los sistemas educativos, desarrolló despacio y con sumo cuidado la idea de Escultismo. Deseaba estar seguro de que daría resultado. Asi pues, en el verano de 1907 llevó con él a un grupo de veinte muchachos a la isla de Brownsea, en el Canal de la Mancha, al primer Campaneto Scouts que el mundo contempló.
El campamento fue un gran éxito.
ESCULTISMO PARA MUCHACHO:
Y después, en los primeros meses de 1908, publicó en cuatro entregas quincenales su Manual de Adiestramiento: "Escultismo para Muchachos", sin siquiera soñar que este libro sería el motor que pusiera en movimiento un sistema que había de afectar a los muchachos del mundo entero.
Escultismo para Muchachos aún no había acabado de aparecer en las vitrinas de las librerías y en los puestos de revistas, cuando ya se habían comenzado a formar patrullas y Tropas de Scouts, no sólo en Inglaterra sino también en otros países.